Introducción

Las impresoras térmicas han sido una herramienta esencial en la mayoría de las industrias, desde la impresión de etiquetas hasta las facturas. A pesar de que son altamente eficientes, también requieren un mantenimiento adecuado para garantizar su duración y óptimo rendimiento. En este artículo, hablaremos sobre los errores que debe evitar al mantener su impresora térmica para evitar costosos reemplazos y una reducción en la calidad de impresión.

Usar papel inadecuado

Una de las causas más comunes de problemas de impresión en las impresoras térmicas es el uso de papel inadecuado. El papel incorrecto puede desgastar la cabeza de impresión, lo que a su vez conduce a impresiones borrosas y de baja calidad. Hay diferentes tipos de papel térmico, cada uno con una resistencia y durabilidad específica. Es fundamental utilizar el papel adecuado recomendado por el fabricante.

¿Cómo elegir el papel adecuado?

El papel térmico es el más utilizado y se divide en dos tipos: térmico directo y transferencia térmica. El papel térmico directo se trata con una capa de químicos que se activan cuando se exponen al calor. El transferencia térmica utiliza una cinta de transferencia que se imprime y luego se adhiere al papel. Es importante considerar las condiciones a las que estará expuesto el etiquetado. Si el papel será expuesto a la luz solar directa, se recomienda utilizar papel térmico directo. Si se requerirá durante un largo periodo de tiempo, entonces es recomendable utilizar transferencia térmica.

No limpiar la cabeza de impresión de manera regular

Una cabeza de impresión sucia es una causa común de problemas de impresión. Los residuos y el polvo acumulados en la cabeza de impresión pueden afectar la calidad y la nitidez de la impresión, lo que a su vez puede afectar la duración de la vida útil del equipo. La limpieza de la cabeza de impresión debe hacerse de manera regular, preferiblemente después de cada cambio del carrete de etiquetas. Utilice un paño seco y suave para eliminar la suciedad y el polvo que se hayan acumulado en la cabeza de impresión.

No revisar y cambiar las piezas de manera regular

Una de las maneras de asegurarse de que su impresora térmica funcione de manera correcta, es revisando los componentes de manera regular. Piezas como el rodillo de presión, el motor y el rodillo de alimentación pueden desgastarse con el tiempo y afectar la calidad de impresión. Es recomendable revisar estos componentes al menos una vez al año y hacer el reemplazo si fuera necesario.

Usar una configuración incorrecta

Como cualquier otro dispositivo, las impresoras térmicas tienen una configuración específica que permite una óptima performance. Configuraciones inadecuadas pueden generar problemas en el proceso de impresión, lo que a su vez llevará a una reducción en calidad y duración de la vida útil de la impresora. Es importante conocer la configuración óptima recomendada por el fabricante y asegurarse de que está configurado de manera correcta.

Configuración Recomendada

• Resolución: 300 ppp (puntos por pulgada)
• Densidad de impresión: 8 puntos/mm
• Velocidad de impresión: 50 mm/s
• Intervalo entre etiquetas: 3 mm
• Ancho de etiqueta: compatible con la impresora
• Top margin: 3 mm

Conclusion

Aplicar las adecuadas prácticas de mantenimiento, junto con la elección adecuada de papel y la configuración óptima, asegurará una vida útil prolongada y un desempeño óptimo de la impresora térmica. Al evitar estos errores, reducirá los costos de reparación y aumentará la eficiencia de su impresora tensa. Recuerde revisar la impresora de manera regular y hacer los reemplazos de piezas si fuera necesario, para optimizar su rendimiento.